Realidad virtual / Realidad aumentada, con Juan Manuel Escobar

Empecemos por la realidad virtual o VR, que es la tecnología que nos permite desconectarnos de nuestra vida física para sumergirnos en entornos virtuales y tener allí múltiples experiencias. Con el VR podemos viajar a la luna, viajar en el tiempo y conocer las pirámides de Egipto o navegar una célula como si fuéramos parte de ella. La virtud principal del VR es ubicarnos en un espacio específico y generar la sensación de que estamos en ese espacio y sumergirnos para aprender, enseñar, entretenernos o trabajar en un proyecto específico. Las aplicaciones han comenzado a verse en turismo, salud, arquitectura, conferencias, y muchos ámbitos más.

Por otro lado, tenemos la realidad aumentada o AR, que nos permite ampliar la información de nuestro espacio físico con imágenes digitales. Todos hemos tenido algún acercamiento con esta tecnología o ¿quién no ha probado uno de los mil filtros en redes sociales? Las opciones son infinitas al momento de crear experiencias digitales que puedan interactuar con el entorno físico de cada usuario. Varias marcas de retail hoy dan la posibilidad de probar los accesorios en su casa antes de comprarlos y de esta forma saber si el color o la forma funcionan o si el tamaño es el adecuado.

Es vital en el futuro del metaverso, ya que nos permite llevar un registro seguro y transparente de operaciones digitales sin la intermediación de terceros. Permite la trazabilidad y transparencia en cada una de las acciones que realicemos en este nuevo entorno virtual. Los NFT (Non Fungible Token) por ejemplo, hacen parte del blockchain y son certificados digitales garantizan la autenticidad y propiedad de un activo digital, funcionando para todas las industrias. Después de años de subir contenidos, imágenes, archivos digitales a la web, hoy por primera vez se puede certificar y garantizar la autenticidad y propiedad digital de uno de estos elementos.

En las empresas líderes en tecnología se han dado dos tendencias al momento de hablar de accesibilidad al metaverso: están quienes creen que su futuro estará marcado por mundos virtuales a los cuáles podemos acceder por gafas de realidad virtual, dónde experimentaremos la web 3.0; y están quienes creen que no debe ser un espacio que nos desconecte de nuestra realidad, sino un elemento que amplíe nuestro espacio físico-real por medio de la realidad aumentada.

Estamos en una etapa muy temprana del desarrollo del metaverso, pero lo que sí está claro es que nos impactará a todos. Modificará industrias, creará puestos de trabajo que ni siquiera imaginamos, creará nuevas economías y comunidades globales, dará mayor valor a lo digital y a las experiencias interactivas e inmersivas. Será una revolución para la cuál aún estamos a tiempo de prepararnos.